Tras los rumores de que Sony introducirá su propia tecnología de mejora de imagen con la próxima PlayStation 5 Pro, han salido a la luz una gran cantidad de detalles que supuestamente describen el hardware de la consola de próxima generación. La CPU sigue siendo el conocido núcleo Zen 2 y la RAM es ligeramente más rápida, pero la GPU está siendo reemplazada por un diseño completamente nuevo. Y parece ser una mezcla peculiar de RDNA 3 y RDNA 4.
Las filtraciones provienen de Inside Gaming, y aunque son afirmaciones no confirmadas, los detalles parecen lo suficientemente creíbles. Por ejemplo, se afirma que el APU personalizado de AMD de la PS5 Pro mantendrá la misma CPU basada en Zen 2 que la PlayStation 5 original. Esto significa todavía ocho núcleos y 16 hilos, lo cual es suficiente para la mayoría de los juegos.
Sin embargo, no funcionará más rápido, aunque aparentemente habrá un modo de operación adicional que permitirá extraer más potencia para alcanzar una frecuencia de reloj un 10% más alta. Sin embargo, esto vendría a expensas de la GPU, que recibiría menos potencia en este modo, pero solo experimentaría una pérdida de rendimiento del 1%. ¿Por qué Sony no optaría por una CPU más rápida? La respuesta es simple: la compatibilidad con versiones anteriores. Todos los juegos de PS5 y los juegos antiguos que también se ejecuten en la plataforma esperan una CPU que funcione a un máximo de 3,5 GHz. Un cambio demasiado drástico podría causar muchos problemas.
Lo mismo sucede con la memoria del sistema. Cada PS5 contiene 16GB de RAM GDDR6 de velocidad promedio a la que la CPU y la GPU comparten acceso. Con una velocidad de 14 Gbps en un bus de memoria agregado de 256 bits, hay un total de míseros 448 GB/s de ancho de banda disponible. La PS5 Pro aparentemente ofrecerá 576 GB/s de ancho de banda, y suponiendo que el ancho de bus haya cambiado, esto equivale a una velocidad de 18 Gbps. Para poner estos números en perspectiva, tanto la Radeon RX 6800 como la RX 7800 XT tienen buses de 256 bits, pero la primera utiliza GDDR6 de 16 Gbps, mientras que la última utiliza chips con 19,5 Gbps para 624 GB/s de ancho de banda. En teoría, esto haría que la PS5 Pro pareciera particularmente atractiva, ya que la RX 7800 XT no se queda atrás, pero esta GPU también tiene 64 MB de caché de nivel 3 (también conocido como Infinity Cache) para reducir la carga de VRAM. No hay indicación de que el APU de la PS5 Pro recibirá Infinity Cache, ya que AMD y Sony necesitan mantener el chip lo más pequeño posible para reducir los costes de fabricación. Pero dado que la CPU y la GPU comparten la misma reserva de memoria, el ancho de banda de 576 GB/s se utilizará intensamente. Especialmente al conocer los supuestos cambios en el procesador gráfico.