Nuevas investigaciones sugieren que las terapias preventivas contra el cáncer pueden llevar inadvertidamente a que la enfermedad entre en un estado latente para luego resurgir más tarde. Este fenómeno se ha observado especialmente en casos de cáncer de mama donde las terapias hormonales, destinadas a prevenir la recurrencia, pueden inducir cambios en las células cancerosas, haciendo que entren en un estado de latencia en lugar de ser eliminadas. Sin embargo, centrarse en una enzima específica podría ofrecer una solución potencial a este desafío.
El estudio, realizado por investigadores que buscan comprender por qué el cáncer de mama a menudo recurre años después del tratamiento inicial, reveló que las terapias hormonales, que se administran típicamente por períodos extensos luego del tratamiento primario, pueden inducir alteraciones en ciertas células. Estos cambios provocan que las células entren en un estado de latencia en lugar de experimentar la muerte celular. Posteriormente, estas células latentes pueden “despertar” años más tarde, dando lugar a una recaída que presenta desafíos significativos en el tratamiento.
No obstante, la investigación ofrece una luz de esperanza al identificar una estrategia potencial para atacar estas células de cáncer latentes antes de que se vuelvan activas nuevamente. Este descubrimiento promete para pacientes con cáncer de mama positivo para el receptor de estrógeno (ER+), que representa la mayoría de los casos de cáncer de mama.
El profesor Luca Magnani, del Instituto de Investigación del Cáncer de Londres, explicó: “Después del tratamiento primario para el cáncer de mama positivo para el receptor de estrógeno, los pacientes siguen una terapia hormonal extendida destinada a erradicar cualquier célula de cáncer residual. Sin embargo, este enfoque no siempre tiene éxito, como lo demuestra la recurrencia del cáncer de mama años o incluso décadas después. Nuestro objetivo era profundizar en los mecanismos subyacentes a este fenómeno para desarrollar intervenciones que pudieran prevenirlo, evitando a los pacientes la angustia de una recaída”.
El estudio, publicado en Cancer Discovery, destacó el papel de una enzima llamada G9a en facilitar la entrada de las células de cáncer en estado de latencia. Se descubrió que inhibir esta enzima evitaba que las células de cáncer entraran en estado latente y también eliminaba aquellas células que ya se encontraban en estado de latencia.
La Dra. Tayyaba Jiwani, Gerente de Participación Científica en la organización Cancer Research UK, que financió la investigación, comentó: “Aunque las tasas de supervivencia del cáncer de mama han mejorado significativamente a lo largo de los años, todavía se producen miles de muertes anualmente atribuidas a esta enfermedad. Los hallazgos de este estudio, aunque en etapas preliminares, ofrecen valiosas ideas sobre posibles objetivos para desarrollar tratamientos innovadores destinados a prevenir la recurrencia del cáncer de mama”.
El cáncer de mama sigue siendo una preocupación de salud importante, siendo la segunda causa principal de mortalidad relacionada con el cáncer entre las mujeres en el Reino Unido. A pesar de los avances en detección y cribado, todavía existen desafíos considerables en el manejo de esta enfermedad, subrayando la importancia de continuar investigando enfoques terapéuticos novedosos.
Según Cancer Research UK, aproximadamente 11,400 muertes se atribuyen al cáncer de mama cada año en el Reino Unido, resaltando la necesidad urgente de estrategias innovadoras para mejorar los resultados de los pacientes. El programa de detección del Servicio Nacional de Salud desempeña un papel vital en la detección temprana, con casi 19,000 mujeres en Inglaterra diagnosticadas con cáncer de mama en el año 2022-23 gracias a esta iniciativa.